Nuestras sonrisas son de suma importancia, ya que, entre otras cosas, nos ayudan a mantener alta la autoestima. Sin embargo, aunque cuidemos bien nuestros dientes, sin una limpieza adecuada por parte de un dentista regularmente, se puede desarrollar sarro y placa. Cuando eso sucede, enfermedades como la gingivitis y la periodontitis (enfermedades de las encías) son una realidad.
Ante la posibilidad de enfermedad de las encías, ¿qué papel tiene y por qué es importante el curetaje dental?
Qué es el curetaje dental
El curetaje implica el uso de una cureta para la realización de este procedimiento dental. Se utiliza para raspar y es muy eficaz en el tratamiento de la periodontitis.
El curetaje (o legrado gingival) se considera un procedimiento quirúrgico. Con la cureta se elimina el revestimiento de tejidos blandos desde una bolsa periodontal. Todo lo que queda es un revestimiento sano del tejido gingival conectivo.
Cuando el tejido ha sido dañado a un nivel severo, para favorecer la curación, se extrae el tejido infectado o dañado. Es probable que esta situación sea la consecuencia de una gingivitis que no se trató y se convirtió en periodontitis. Si se produce un daño adicional, puede afectar no solo al tejido, sino también al hueso. El curetaje es, posiblemente el tratamiento más eficaz para tratar la gingivitis y la periodontitis.
¿Por qué necesito un curetaje?
Un dentista puede diagnosticar gingivitis o periodontitis y diseñar un tratamiento adecuado, que puede incluir un curetaje dental para eliminar el tejido infectado o dañado.
La gingivitis es la fase leve de la enfermedad de las encías y causa hinchazón, enrojecimiento y sangrado de las encías. La mayoría de las veces es causada por falta de higiene, placa y acumulación de sarro. Si se recibe un tratamiento a tiempo, la condición es reversible y no conducirá a una infección más grave.
Sin embargo, si se ignora la gingivitis, se convierte en periodontitis, que es la fase más grave de la enfermedad de las encías. Una vez se llega a esta etapa, los huesos y los tejidos pueden deteriorarse muchísimo como resultado de la inflamación causadas por la afección.
Durante el proceso inflamatorio, las encías y los dientes se separan. Debido a la separación, se crean espacios o bolsas. La formación de estas bolsas se debe a una infección provocada por las bacterias atrapadas en su interior. La consecuencia final es daño óseo y pérdida de dientes.
Al primer síntoma de problemas en tus encías, ¡acude a tu dentista! Solo en tu clínica dental de confianza te proporcionaran el diagnóstico y tratamiento que necesitas.